Detrás del lente: un viaje con Polar Light
Hace un tiempo la vida me puso en el camino una oportunidad que no se planea, solo se siente: un behind the scenes con la gente de Polar Light. Nos fuimos a una playa en La Guaira, sol cayendo como oro líquido sobre el mar y ahí comenzaron a llegar los verdaderos guerreros de la imagen —fotógrafos, videógrafos, talentos— todos fluyendo, todos conectados. Y yo... yo esperando mi momento.
Me entregaron la misión: "Agarra unos talentos y dispara". Y ahí fue, como un pez en su agua, como el surfista que reconoce su ola y no lo piensa dos veces: rema. Así mismo me lancé, sin miedo, sin duda. Cada click de mi cámara fue un latido del alma, cada foto un pedazo de la vibra que se vivía ahí. Producto, consumo, lifestyle...
No eran solo imágenes, eran verdades congeladas en luz.
Michael Davis
La energía era única, casi mística. No era solo trabajo, era un ritual. Estábamos ahí no solo para crear contenido, sino para inmortalizar esencia. Y eso hice, con respeto, con pasión, con profesionalismo. Porque esto no es solo disparar una cámara. Es saber cuándo, cómo y por qué. Es entender la calle, pero hablarle con poesía. Es ser raíz y cielo al mismo tiempo.
Estas fotos son el reflejo de ese momento. No solo lo que se vio, sino lo que se sintió. Y si tú también puedes sentirlo, entonces ya cumplí mi propósito.
